Comair, el operador sudafricano de vuelos de British Airways, dejó en tierra todos sus aviones después de quedarse sin efectivo, dijo la compañía.
La aerolínea, que está bajo administración, también opera la aerolínea económica Kulula. Esos aviones también están en tierra, con la venta de boletos para ambas aerolíneas suspendida.
Los administradores de Comair «han informado que el proceso para recaudar el capital necesario está en progreso y que hay razones para creer que tal financiamiento puede asegurarse», dijo la compañía en un comunicado el martes por la noche.
«Una vez recibido, la aerolínea podrá reiniciar las operaciones, pero lamentablemente en estas circunstancias, los practicantes no tienen más remedio que suspender voluntariamente todos los vuelos programados hasta que se confirme la financiación», agregó.
En mayo de 2020, en el punto álgido de los confinamientos por la pandemia, Comair solicitó el rescate empresarial voluntario, un procedimiento similar a la protección por bancarrota, para reestructurar la empresa.
Para febrero de este año, la compañía había recuperado una participación de mercado del 40 por ciento y reanudó la mayoría de los vuelos.
Los funcionarios de aviación sudafricanos habían suspendido los vuelos de Comair durante cinco días en marzo por preocupaciones de seguridad, lo que asestó un nuevo golpe a la compañía.