La Unión Europea emprendió una cacería contra los microplásticos, y la brillantina fue la primera en la lista.
En un esfuerzo por restringir la venta de plásticos de menos de cinco milímetros de tamaño, la UE promulgó una prohibición contra los polvos brillantes, incluidos los que se utilizan en los productos de maquillaje. A partir del 18 de octubre, ningún residente podrá comprar ni vender brillantina en los 27 países europeos de la UE.
Sin embargo, la UE no prohibió todos los tipos de brillantina, ya que todavía se permite cualquier alternativa ecológica.
Según la Comisión Europea, la brillantina biodegradable está permitida. “El propósito no es prohibir toda la brillantina, sino reemplazar la brillantina de plástico con brillantina más ecológica que no contamine nuestros océanos”, señala el comunicado. “Solo se prohíbe la brillantina hecha de plástico no biodegradable e insoluble”.
En específico, solo se permite comprar y vender en la UE cualquier brillantina hecha de materiales “solubles, naturales o inorgánicos”.
La prohibición de la brillantina surge como resultado del objetivo de la UE de convertirse en el primer continente de neutralidad climática para 2050, como se indica en su Pacto Verde Europeo. El acuerdo consta de tres pilares: no habrá emisiones netas de gases de efecto invernadero para 2050, se desvinculará el crecimiento económico del uso de recursos e implicará a todas las personas y lugares.
El Reino Unido está exento de la prohibición, ya que abandonó la UE el 31 de enero de 2020.
Un informe de la BBC dio a conocer que antes de la fecha oficial de inicio de la prohibición, en la UE se detectó un aumento notable en el número de consumidores que adquirieron el aditivo brillante y se abastecieron antes de que ya no pudieran conseguir el producto real. Según un estudio del Journal of Hazardous Materials, incluso lo que la UE establece como brillantina “segura” podría involucrar materiales plásticos en el proceso de creación de una alternativa ecológica.
Aunque la prohibición ya está en vigor, la UE todavía permitirá que los minoristas vendan el suministro restante de brillantina y productos que contienen el material hasta agotar existencias. La Comisión Europea estableció que se pueden seguir vendiendo los “microplásticos, incluida la brillantina plástica, que se utilicen solos o en productos para usos que requieran un periodo de transición específico” hasta que finalice el periodo de transición.
La comisión también señaló que, desde el 17 de octubre de 2031 hasta el 16 de octubre de 2035, los productos de maquillaje y esmaltes de uñas deben incluir una etiqueta que indique si contienen microplásticos para ponerlos a la venta.
Aparte de la UE, otros gobiernos han dedicado varios años en esfuerzos para prohibir el uso de microplásticos. En 2015, la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos prohibió el uso de microesferas de plástico en la fabricación de exfoliantes, limpiadores y pasta de dientes para evitar una mayor contaminación del agua.