La agencia meteorológica estatal AEMET advirtió sobre tormentas secas -es decir, truenos y relámpagos sin precipitaciones- en muchas partes del país.
España es uno de varios países del sur de Europa que han estado lidiando con temperaturas récord este verano, lo que llevó a las autoridades a advertir sobre los riesgos para la salud, particularmente para los ancianos y las personas con afecciones médicas.
Las temperaturas en algunas zonas de la mitad sur de España se mantuvieron por encima de los 27 °C la noche del martes y la mañana del miércoles, dijo el portavoz de AEMET, Rubén del Campo.
“El miércoles será el día más intenso en términos de extensión y temperaturas”, dijo Del Campo, y agregó que la ola de calor continuará hasta el fin de semana.
En la ciudad central de Toledo, donde la temperatura se fijó en 41C, los turistas se refugiaron del calor en bares equipados con ventiladores de vapor.
“Necesitamos aprovechar al máximo la (temporada) turística”, dijo Martín, mesero en la cafetería El Greco. “Con estos ventiladores al menos podemos hacer que la terraza sea un poco más agradable y fresca”.
En Casa Antonio, que vende productos españoles tradicionales, el propietario Alberto Solano estaba repartiendo sangría congelada a los turistas que pasaban.
“Encontramos algo de sombra y algo de sangría”, dijo Ryan Williams, de 53 años, un entrenador de baloncesto de Colorado que visitaba a su hija Emily. “Es muy refrescante”.
Las olas de calor registradas en España y Europa en general este verano también han empeorado una sequía prolongada, bajando los niveles de los embalses a medida que aumenta la evaporación y el consumo de agua, lo que ha llevado a las autoridades de Cataluña a imponer restricciones.
Mientras España se asfixia por las altas temperaturas, el hielo de sus montañas se derrite.
The Cryosphere, una revista científica centrada en el agua y el suelo congelados, publicó el martes un artículo revisado por pares que muestra cómo el glaciar Aneto, el más grande de los Pirineos, se está derritiendo y podría desaparecer por completo.
El documento muestra que el glaciar perdió alrededor de dos tercios de su superficie entre 1981 y 2022 y se ha reducido a solo medio kilómetro cuadrado. El espesor medio del hielo del glaciar se redujo en unos 30 metros en el mismo período.
El deshielo se aceleró en 2021 y 2022, ambos años especialmente cálidos en España
