“Me levanto, un baño y luego me pongo a forjar. Es veneno, da pa’ arriba de muy buena calidad. Los teléfonos no paran nunca de sonar. Si no es alguna plebita, es porque un cliente quiere más”. Así inicia la canción PRC de Natanael Cano y Peso Pluma. Se trata de los denominados ‘corridos tumbados’ o ‘corridos bélicos’. o grupos como fuerza regida
Como su nombre lo dice, se trata de melodías que pretenden enaltecer las actividades criminales del trasiego de drogas; a un personaje del mundo del hampa e, inclusive, alguna hazaña criminal como un tiroteo con la justicia o un escape de una cárcel de máxima seguridad. La mayoría siempre incluye violencia.
En la melodía PRC, se habla de cómo un joven puede consumir drogas sintéticas, gozar la vida acompañado de mujeres y portando ropa de lujo “esté bien o mal”. Las palabra “PRC” sería una abreviatura de “polvo, ruedas y cristal”, refiriéndose a la cocaína y la MDMA o éxtasis, respectivamente.
Los ‘corridos tumbados’ son un subgénero derivado del corrido, aunque este posee ritmos de la música urbana como el rap, el hip-hop, el trap e, incluso, el reguetón. Los instrumentos musicales más comunes de estas composiciones son trompeta, teclado, guitarra, saxofón, bajo eléctrico y bajo acústico.
En México, la palabra ‘tumbado’ se refiere a que son ‘urbanos’, ‘callejeros’, ‘informales’.
Algunos expertos aseguran que los primeros músicos en exponer este género en las principales plataformas fueron Dan Sánchez y Natanael Cano, dos cantantes y compositores mexicanos, que mezclaron el rap a las guitarras de los corridos. De allí surgieron canciones como Soy el diablo, El chamaquito o El de la codeína. Sánchez y Cano también dejaron atrás los atuendos típicos de cantantes del género regional mexicano, y comenzaron a vestirse con un estilo más urbano, influenciados por los reguetoneros.
A estos dos jóvenes músicos, les precede el cantante de música norteña, Ariel Camacho, quien hasta su muerte a los 23 años de edad, le estaba dando un giro a los corridos con el uso de tres instrumentos, dos cuerdas y una tuba; mismos que fueron adoptados para los ‘corridos tumbados’.
En meses recientes, el cantante Hassan Emilio Kabande Laija, de 23 años de edad, conocido artísticamente como Peso Pluma, ha alcanzado una popularidad absoluta en México y una fama de talla mundial.
Gracias a éxitos como Ella baila sola, PRC y AMG, Peso Pluma posicionó ocho canciones ‘tumbadas’ en el Top 50 Global de la plataforma Spotify; y en las últimas semanas, nueve en la lista Billboard Global 200. Los temas los canta a dueto con Natanael Cano, Junior H, Gabito Ballesteros y Eslabón Armado.
